Brujas. Historia de una persecución / Pd. de CAMTHORNE, NIGEL

Durante el período comprendido entre 1450 y 1750, más de diez mil personas, en su mayoría mujeres, fueron acusadas en Europa y la América colonial de practicar brujería y adorar al diablo. Esto desencadenó una persecución que resultó en la muerte de decenas de miles de personas, muchas de las cuales fueron torturadas antes de ser ejecutadas. La histeria religiosa que alimentó esta cacería de brujas tenía sus raíces en la represión de la secta valdense por la Iglesia católica.

La creación de la Inquisición y la publicación del libro Malleus Maleficarum, conocido como la «Biblia de los cazadores de brujas», contribuyeron a la propagación de esta tendencia por toda Europa y llegaron hasta Estados Unidos, donde se llevaron a cabo famosos juicios como el de las brujas de Salem. Sin embargo, con el tiempo, estas ideas crueles fueron rechazadas por una población más razonable.

Aunque los juicios por brujería continuaron en algunos países como Escocia, Noruega y Hungría hasta finales del siglo XVIII, el avance de la razón científica eventualmente puso fin a la caza de brujas.